Una escapada a solas

Se acercó timidamente tomando la mano que Jack le había ofrecido. Al llegar a la altura de ambos, saludó al director con una leve inclinación de cabeza sin perder la sonrisa al escuchar las palabras que Jack había dicho haciendo referencia a ella, pero la sonrisa desapareció pronto de su rostro ante la pregunta del director y el efecto que había causado esta en Jack. Rápidamente estrechó su mano.

Guardó en silencio escuchando la conversación entre ambos con la vista fija en el suelo, aunque a veces alzaba la mirada buscando en el rostro de Jack algún rastro de emoción que le indicara como se encontraba, pues nunca habían hablado sobre este tema y no sabía como se sentía o que pensaba al respecto.

Esperó pacientemente a la respuesta del director aunque seguía mirando a Jack sin percatarse prácticamente de lo que ocurría a su alrededor, tan solo esperaba que ese desafortunado comentario por parte del director no le hubiese hundido a pesar de no manifestar sus sentimientos en esos instantes.

-Gracias -susurró cuando el director le entregó la llave sin soltar la mano de Jack ni un solo instante, luego se despidió con una nueva inclinación de cabeza siguiendo los pasos de Jack.

Nada más cerrar la puerta se giró hacia Jack mirándole largamente en silencio

-¿Quieres que hablemos cielo?... -dijo finalmente.

-Jack... mi vida... -cerró los ojos hablando en susurros mientras lo mantenía abrazado con fuerza contra ella como si temiera que fuera a desaparecer- no te soltaré, no te preocupes.

Se dio cuenta que mantenía la llave apretada con tanta fuerza entre sus manos, que esta le había dejado la marca de su forma en la palma

-Cielo... será mejor que vayamos a tu habitación, allí podremos estar mejor, descansarás todo lo que necesites, hablaremos si tu quieres y... y verás como después de todo te sientes mejor.

Pasó un brazo alrededor de su cintura ayudándole a subir las escaleras, buscó la habitación de Jack y una vez hubo parado frente a la puerta, le dejó apoyado contra la pared para poder abrirla

-Vamos cielo... dentro podrás descansar mejor -susurró volviendo a pasar un brazo alrededor de él cuando ya había abierto la puerta.

Se apoyó contra la puerta jugueteando con la llave entre sus manos

-Yo... no se que fue lo que pasó cielo... pero por muy preparados que estemos, hay veces que no podemos hacer nada para cambiar las cosas o para evitarlas, con todo eso seguro que tus padres estarían orgullosos de lo que has llegado a ser gracias a esos entrenamientos.

Prestó atención a sus palabras pero sobretodo a sus gestos, como había acariciado su espada... la expresión de su rostro...
Se acercó lentamente hasta donde él se encontraba

-Vengarte y acabar con la vida de esos asesinos no ha servido de mucho para calmar tu espíritu ¿no? -susurró agachándose hasta quedar en cuclillas para poder mirarle frente a frente.

Jugueteó ahora con sus manos sin apartar la mirada de estas

-Es normal que los eches de menos Jack... pero no debes culparte por lo que sucedió y estoy segura de que ellos se alegraron de que salieras de esa a pesar de las consecuencias que conllevó para ellos -dijo soltando sus manos para pasar el dorso de una de ellas por su rostro con delicadeza- eres una buena persona Jack, saliste adelante, ahora eres capaz de protegerte a tí mismo y a los de tu entorno, eso es lo que todo padre querría para su hijo.

-Vamos cielo... no tienes que darme las gracias -le devolvió el abrazo contenta de verle sonreir nuevamente- estamos juntos ¿no? para lo bueno y lo malo... y sino estamos para apoyarnos en estos momentos... a demás creo firmemente en todo eso que te he dicho -se separó ligeramente de él para alzarle el rostro cogiéndole de la barbilla- estarían muy orgullosos de ti, al igual que lo estoy yo.

Se abrazó a él frotando su mejilla con la nariz de forma mimosa

-La verdad es que prefiero no saberlo, porque eso significaría que no estaríamos juntos y yo a tu lado me encuentro muy agusto.

Asintió arrugando la naricita riendo suavemente

-Claro mi vida, con todo esto de la llegada me había olvidado por completo de ese delicioso desayuno del que me habías hablado -se levantó cogiéndole de las manos para ayudarle a levantar- ¿vamos ya?