Jack // Ravenna

-Creo que si... ahora está mucho mejor -dijo estrechando su mano para luego soltarla y poder proseguir con el entrenamiento- por lo menos tengo un punto de referencia.

Guardó silencio esperando a escuchar cualquier ruido que pudiera hacer delatando su situación.

Respondió al cabo de unos instantes de analizar los estímulos sonoros que pudieran decirle donde estaba

-Tal vez... ¿en la zona de entrenamiento con los arcos?

Se volvió hacia donde procedía la voz

-Ahora estas de frente a mi... y teniendo en cuenta que no era la zona de arcos donde te situabas y la distancia que puede haber de ese lugar hasta aquel hacia donde estoy mirando ahora... -se mordió el labio calculando la zona.

-Si no me equivoco estas junto a las armas... en el lugar donde se guardan, o bueno, tal vez debería decir que estabas -se corrigió a sí misma al escuchar la voz de Jack algo más cerca- porque te acabas de mover.

-Ahora estás detras de mi -dijo al escuchar su voz a sus espaldas- puedo situar tu voz de forma generalizada, pero me cuesta reconocer el lugar exacto, tal vez sea por no haber prestado demasiada atención al entorno...

Le ayudó a recoger las cosas llevándole también la toalla y la botella que momentos antes habían estado utlizando

-¿Buscabas esto? -dijo tendiéndole el agua.

Echó a reir devolviéndole el gesto

-Claro que sí, es una pequeña venganza por el entrenamiento de hoy -dijo guiñándole un ojo y dándole después un sorbo a su botella- tu me lo pones dificil en algunos aspectos y yo te lo pongo a ti en otros

Dejó también su botella que, por el contrario de la de Jack, estaba medio llena

-Bueno... para entonces ya habré ideado otra venganza no te preocupes por eso. Todo irá en proporción a lo duros que sean los entrenamientos -dijo volviéndole a sacar la lengua.

Lo miró con seriedad

-Pues la proxima vez te quitaré el agua y la toalla, así aprenderás -dijo echándose a reir finalmente.

-Incluso más, no tienes ni idea de lo mala que podría llegar a ser contigo -le sacó la lengua mientras seguía bromeando- podría hasta no darte de mi agua aunque me la pidieses

-¿¿Forja?? -preguntó sorprendida de que le hubiese hecho esa pregunta- si te digo la verdad... no he conocido a nadie que supiese de eso.

-Todo lo que mi maestro me enseñe será bueno para mi -dijo sacándole la lengua como respuesta a su gesto- ¿te parece bien que vayamos ahora? me gustaría ver como trabajas y que es lo que haces en esa forja.