Tras la muerte del pirata

Llegué al jardín y entonces intuí que me había equivocado en el calculo...Bueno no importaba,estaba muy cerca pero también estaba muy cerca la cascada, supongo que un poco de sangre no corromperá la pureza del agua, seguro que se desintegra en varios segundos.

Asi que sin darle mas vueltas me quité la ligera armadura y la camiseta, quedando el torso completamente al descubierto, luego me quité el resto de la ropa. Los pantalones y la camiseta las deje en un arbol junto a la espada una vez las limpié junto a la armadura. Ya la ropa limpia me tocaba a mi, asi que me tiré de cabeza al agua y comencé a bucear un rato.