Una escapada a solas

-¿Está ahí dentro? -se queda mirándole unos segundos algo dubitativa y luego se asoma con cautela a la puerta que Jack le ha abierto- ¿no se asustará si ve entrar a alguien desconocido? -pregunta asomándose un poquito más para tratar de verle.

Se quedó maravillada al ver el animal al cual se acercó extendiendo lentamente una mano para poder acariciar su cabeza

-Sin duda se trata de un buen ejemplar y muy bien cuidado por cierto -susurró deslizando una mano ahora por el cuello del caballo- es precioso cielo... -dijo con una amplia sonrisa- tenías razón, me encanta.

Se apartó un poco para dejarle espacio y que pudiera cepillarlo con toda tranquilidad

-Está muy tranquilo... parece que no se ha olvidado de ti en todo este tiempo

-Pues es una pena que tenga que quedarse aquí, ¿no podrías llevartelo a Limbhad? con todo lo que habeis pasado juntos... y mucho más si has cuidado tanto de él desde bien pequeño -comentó acercándose de nuevo al caballo para acariciarle las crines que le caian sobre la frente

-Pensé que tal vez en los jardines como eran bastante amplios... y aquí estaría encerrado en las cuadras... -suspiró mirando a los ojos del animal- bueno no importa, imagino que aquí lo cuidarán igual de bien, además siempre que quieras podrás venir a verlo...

Dejó de acariciar al caballo para ayudar a Jack a colocar las cosas.

-¿Teneis algún recinto en el lugar donde poder llevarlo para poder montarlo? -preguntó miraándo con curiosidad las reacciones del animal.

Enarcó una ceja mirándo la armadura que estaba revisando Jack

-¿Eso es para el caballo? No irás a ponerselo ahora ¿no? parece muy incómoda...

Se sobresaltó cuando le escuchó resoplar

-Ya... imaginaba que lo sabría... -ladeó ligeramente la cabeza algo confusa mirando a ambos alternativamente- ¿pero porqué decías eso?

-¡Ah! entiendo... -se volvió para acercarse un poco más a él y así poder acariciarle la cabeza- perdona Storm, no fue mi intención herir tus sentimientos -sacó los terrones de azucar ofreciéndoselos como disculpa.

-Me alegro de que no se enfadara conmigo por ese comentario -dijo mientras reía por las cosquillas producidas por el animal, luego se situó al lado de Jack siguiendole hasta la salida- ¿Vamos a ir a dar ese paseo sobre él o solo lo quieres sacar para que le de él aire sin montarlo?

Lo siguió hasta que llegaron a las pistas.
Una vez allí se apartó a un lado del recorrido de obstáculos para dejarles espacio más que suficiente para que el caballo pudiera correr sin llegar a entorpecerle el paso.

Tomó asiento acomodándose para poder ver lo que hacían.
Sin duda ambos parecían estar disfrutando del paseo que estaban dando y ella por su parte estaba maravillada con los elegantes andares y movimientos del caballo.